El cacique de Apalache va con orden del gobernador a reducir sus indios
Con la presa del cacique se volvió el general muy contento al pueblo de Apalache, por parecerle que con la prisión del señor cesarían las desvergüenzas y atrevimientos de los vasallos.
Los cuales, después que los castellanos entraron en aquel pueblo, no habían dejado de hacer insultos de día y de noche, dándoles arma y rebatos muy a menudo, andando tan astutos y diligentes en sus asechanzas que, en desmandándose el español, por poco que se apartase del real, luego lo salteaban y mataban o herían.
Sign in to unlock this title
Sign in to continue reading, it's free! As an unregistered user you can only read a little bit.