De cómo saldó sus cuentas con la justicia Martín Garatuza
La policía del marqués de Cerralvo y del visitador Carrillo no inquietaba, por cierto, mucho a Garatuza, a pesar de que la Audiencia había dado sus órdenes para que todos los alcaldes procurasen su aprehensión. Martín era hombre de recursos y en último caso hubiera mudado de domicilio y marchádose a la ciudad de Puebla o Valladolid; pero estaba empeñado en el negocio de doña Esperanza, que además de su amor propio comprometido, le ofrecía un buen porvenir para su hija; y Martín comenzaba ya a pensar en el porvenir.
Así es que se hacía preciso para obrar con más libertad, saldar cuentas con la justicia, y Garatuza se determinó a verificarlo.
Sign in to unlock this title
Sign in to continue reading, it's free! As an unregistered user you can only read a little bit.