Toggle Dropdown Serif Sans-serif Monospaced Dyslexic Bold Italic Font size: 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 Mark as read [object Object] Only page of title 710 70 Very Easy Aquella cueva del herbolario Se me ofrecía como un breviario Lleno de goces y de visiones Cálidas: Sierpes y tentaciones. ¡Y tan oscura! Daban su esencia Las yerbas. Era llena de ciencia. Embalsamado breviario, abierto Sobre las sombras de un hondo huerto. Clave de aromas que en sí condensa Del Universo la visión densa. I Yerba del Hombre de la Montaña, El Santo Oficio te halló en España. Cáñamos verdes son de alumbrados, Monjas que vuelan, y excomulgados. Son ciencia negra de la Caldea Con que embrujada fue Melibea. II ¡Canela en rama! ¡Tabaco en rolla! Visión de Cuba, canción criolla. Lentos guitarros, lentos danzones, Negros bozales y cimarrones. Rejas morunas, rosas bermejas, Olor de senos tras de las rejas. Olor divino de la mulata Que trae un recuerdo del Mahabharata. Ardiente esencia de la canela, (¡Canela! Encomio de la mozuela). III ¡El Heliotropo! Tan eclatante Con su académico griego pedante. ¡Los girasoles! Incas trofeos, Mito de mitos indo-caldeos. Y el otro Helio-Tropo morado De flor humilde, muy esenciado. El buen amigo de las solanas Viejas, y huésped de las ventanas. Por veces muere de un arrebato, Dicen que es cuando lo riega el gato. (Siempre hay un gato que ronda el tiesto, Mueve la cola y arruga el gesto, Husmea el griego de la Academia Y lo aniquila con su blasfemia). IV ¡Coca! A tu arcana norma energética Rimo estas prosas de apologética. ¡Coca! Epopeya del Araucano Que al indio triste torna espartano. Lima virreina, Lima la lueña, No es bizantina porque es tu dueña. Mordió Pizarro tu fibra dura, Y se hizo uno con su armadura. Alzó ciudades, cavó tesoros, Tuvo mujeres como los moros; Hizo la guerra que hace el creyente, Fue tan avaro como valiente; Y cachicuerno como el cuchillo Con que a los puercos mató en Trujillo. (Tuvo en las Indias las mismas manos, Allá son reyes y acá marranos). V ¡Xalapa! Iglesias y costanillas, Tras de, las bardas uno en cuclillas VI ¡Campeche! Sedes. Frondas de loros. Pintados vuelos de tocoloros. Flautas que encantan a las serpientes, Rostros greñudos de blancos dientes. ¡Viejo Tlaxcala! ¿Boca de enigma, Porque a la sierpe toma benigna! Tu flauta? ¿Acaso llegas de Oriente, Flauta que encantas a la serpiente? ¡Mar de esmeralda! ¡Bosques con monos! ¡Haciendas de Indios! ¡Blancos Patronos! VII ¡La Pita! Verde que en cadmio quiebra Con un remedo de la culebra. Zumo de pita. Pulque. Placeres De Baco, y celo por las mujeres. Melancolía de aquellos llanos De Apan. Jinetes. Áureos jaranos. Melancolía del Indio. Pena De los que arrastran una cadena. ¡La Pulquería! Lento guitarro. Bailes lascivos. Reto de un charro. (Pulque: Brebaje de gusto adusto Que el Indio encuentra muy de su gusto). VIII ¡Cacao! Afrodita, jardín del puma Y chocolate de Montezuma. El chocolate -parece cuento- No lo inventaron en un convento. Unos lo achacan a los Aztecas, Disputan otros si Chucumecas. Hay sus dos credos con sus dos papas. ¡Si fue en Tabasco! ¡Si fue en Chiapas! (Cacao en lengua del Anahuác Es pan de dioses, o Cacahuác. Y el hombre sabio sigue la broma, Cacao en lengua, griega Theobronia). IX ¡Té paraguayo del Pilcomayo! -Al mate dicen té paraguayo. El mate amargo. Viento pampero. Las vidalitas en el potrero. Barbas caprinas, rostro cobrizo, Largas miradas de adusto hechizo. Viejas de negra teta colgante, De algún armenio la sombra errante. Galopa el gaucho. Lazo tendido, Caballo al viento y un alarido. Es el compadre que en el bochinche Dice al compadre: -Vea no le pinche La Pulpería. La Montonera. La Pampa enorme con su sonsera. (¡Mate! Una negra con su canción Cebaba el mate. Yo era el patrón). X ¡Adormideras! Feliz neblina, Humo de opio que ama la China. El opio evoca sueños azules, Lacas, tortugas, leves chaúles; Ojos pintados, pies imposibles, Lacias coletas, sables terribles; Verdes dragones, sombras chinescas, Trágicas farsas funambulescas; Genuflexiones de Mandarines, Sabias Princesas en palanquines; Y nombres largos como poemas Que evocan flores, astros y gemas. XI ¡Verdes venenos! ¡Yerbas letales De Paraísos Artificiales! A todos vence la marihuana, Que da la ciencia del Ramayana. ¡Oh! marihuana, verde pneumónica, Cannabis índica et babilónica. Abres el sésamo de la alegría, Cáñamo verde, kif de Turquía. Yerba del Viejo de la Montaña, El Santo oficio te halló en España. Yerba que inicias a los fakires, Llena de goces y Dies Ires. ¡Verde esmeralda -loa el poeta Persa -tu verde vistió el profeta! (Kif -yerba verde del persa- es El achisino bhang bengalés. Charas, que fuma sobre el diván entre odaliscas el Gran Sultán). Se apagó el fuego de mi cachimba, Y no consigo ver una letra. Mientras enciendo -Taramba y timba Tumba y taramba- pongo una &. End of title Sign in to unlock this title Sign in to continue reading, it's free! As an unregistered user you can only read a little bit. Links External resources bookshop Wikipedia Project Gutenberg Goodreads Google Books
Se apagó el fuego de mi cachimba, Y no consigo ver una letra. Mientras enciendo -Taramba y timba Tumba y taramba- pongo una &.